Estoy sentada en un rincón. Más bien, estoy acurrucada de dolor. Una lágrima o dos recorren el rosado de mis mejillas. La cara me arde de asco. Los ojos se me quieren cerrar a toda costa y no los dejo, no sé porqué. Es esa cosa tuya que me sube y me baja por dentro, que me hiela las venas, que me satura los latidos de una agitación severa. Y de repente, ya no tengo palabras, no sé qué decir, y se acabó. No más escalofríos, no más temblor.
Se fue, sí, creo que es eso, y ahora vuelve...
2 comentarios:
me acabo de dar cuenta q tu imagen de cabecera es mas larga de lo q deberia ser.. no se si x el diseño q elegiste para tu blog.. pero se va mas a la deracha... sale fuera del cuadro
te amo
Que buena foto bel.No la había visto. Te quiero tanto...
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